Si ha habido polémica sobre algún libro últimamente, ese es Cincuenta Sombras de Grey.
Yo he leído la trilogía. Dos veces. Sí, dos veces...
He oído comentarios de todo tipo. Uno de los que más gracia me ha hecho es: "Está súper mal escrita"... Vale, quizás las señora James no es William Shakespeare, pero personalmente, cuando me leí el libro, no me detuve a analizar sujetos y predicados, complementos directos, indirectos o de nombre... La leí como lo que es, una novela para pasar el rato... Los personajes no son los más interesantes del mundo, pero vaya, sigo pensando que como novela, no está mal...
Otros lo ven como una provocación, un libro degenerado, un insulto a la mujer (por el tema de la sumisión). Yo lo sigo viendo como lo que es, una novela, ficción, para pasar el rato...
Empecé con el primer libro mientras hacía mis sesiones de quimioterapia. Siempre he tenido debilidad por las novelas romanticonas, Victoria Holt es una de mis autoras preferidas, lo confieso. Y he pasado súper buenos ratos con novelas de Marian Keyes, Sophie Kinsella,...
Así que, en una de mis visitas al hospital de día, empecé a leer "50 sombras de Grey". Me enganchó, y mucho... Me leí el libro tan rápido que a los dos días volvía a hacer una visita al Fnac para comprarme el segundo (y el tercer) libro.
Y me los leí a la misma velocidad. Reconozco que el tema sexo da morbo, pero también confieso que los dos siguientes libros ya no los leí por el tema erótico-festivo (que al fin y al cabo es más de lo mismo), sino porque tenía curiosidad absoluta por saber como seguiría la relación entre Christian Grey y Anastasia Steel. Como el tío duro, rico y con pasado oscuro pierde los papeles por la universitaria "mojigata".
Como luego cada uno interprete el libro, ya es otra historia. Si a unas les ha dado por ser sumisas y poner en práctica cosas del libro...
Durante mi tratamiento necesitaba leer cosas que me hicieran pasar el rato. Nada de libros profundos con trasfondos metafísicos... Novelas rosas, amarillas o verdes, divertidas, entretenidas, misteriosas y romanticonas, sobretodo romanticonas... Cuando estás enfermo, o luchando por curarte, necesitas pasar el tiempo de la mejor manera posible, entretenerte para no pensar en lo que tienes encima. Y a mí, el señor Grey me ayudó a que mi tratamiento fuera más llevadero.
Y sigo pensando que, como novela, no está mal...
By Rebe
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